78 vistas
El candidato a diputado por Magallanes, Juan José Srdanovic Arcos manifestó su preocupación y molestia ante lo ocurrido con el proyecto de hidrógeno verde en San Gregorio, planteando que “esta situación refleja con crudeza el nivel de improvisación e incompetencia del Gobierno de Gabriel Boric. La decisión de frenar una inversión extranjera de más de 11 mil millones de dólares por observaciones secundarias en torno a la fauna —como la presencia de reptiles y especies menores— es un golpe directo al desarrollo de la Región de Magallanes y a la credibilidad del país ante el mundo”.
A juicio del también abogado, el llamado “Estado ambiental” que “el gobierno proclama ha terminado por convertirse en un Estado paralizado, donde cada decisión productiva se subordina al miedo de ofender sensibilidades ideológicas. No se trata de cuidar el medioambiente —que todos respaldamos—, sino de una visión dogmática, talibán y desinformada que ha reemplazado la ciencia por la consigna y la planificación por la tramitación eterna”.
En forma categórica, Srdanovic Arcos afirma que “Magallanes no necesita discursos, necesita decisiones. Necesita autoridades capaces de compatibilizar la protección ambiental con el desarrollo humano y no un aparato estatal atrapado en su propio talibanismo administrativo. Es hora de que el Estado asuma que, sin inversión, no hay futuro. Es hora de que entienda que cuidar el medioambiente no significa detenerlo todo, sino hacerlo bien, con estándares, con transparencia y con sentido común, de lo contrario, el talibanismo del Gobierno está matando a Magallanes”.
Ineficiencia y fundamentalismo
El candidato a diputado por Magallanes puso énfasis al señalar que “Chile no puede darse el lujo de perder inversiones de esta magnitud. Magallanes no puede seguir siendo víctima de la ineficiencia centralista ni del fundamentalismo ambiental. Lo que está en juego no es sólo un proyecto: es el futuro energético y social de todaunaregión”.
Juan José Srdanovic Arcos sostuvo que “el hidrógeno verde representa una oportunidad histórica para Magallanes. No sólo por su potencial económico, sino porque podría posicionar a la región como líder mundial en energía limpia, con empleos de alta especialización, infraestructura portuaria, investigación científica y transferencia tecnológica”. Sin embargo, dice “el Gobierno parece preferir que Magallanes siga dependiendo de subsidios y empleos públicos antes que permitirle levantar su propia industria energética”.
Agrega que mientras países como Noruega, Australia o Arabia Saudita avanzan a paso firme en la producción y exportación de hidrógeno, “en Chile seguimos discutiendo si una lagartija podría verse afectada. Este nivel de miopía es lo que ha convertido a la burocracia en el nuevo muro de contención del progreso. Cada trámite adicional, cada Informe Consolidado de Aclaraciones, Rectificaciones o Ampliaciones (ICSARA) excesivo, cada “observación complementaria” sin sustento técnico, no sólo retrasa los proyectos: los mata”.
Finalmente, el candidato a diputado por Magallanes, Juan José Srdanovic Arcos dijo que “la incompetencia del Gobierno no es sólo técnica, sino política. No hay liderazgo ni visión estratégica. Se privilegia el aplauso ideológico por sobre el bienestar de los ciudadanos. Se actúa con desconfianza hacia la inversión privada, como si el desarrollo fuera un pecado, y el crecimiento una amenaza. El resultado es evidente: proyectos paralizados, inversionistas que se van, empleos que no se crean y comunidades que siguen esperando”.